Una triste realidad está presente entre los españoles, el suicidio. Cada año las cifras se mantienen o aumentan. Hombres, mujeres y niños son vulnerables a sufrir este grave problema. Pero en especial la generación milennials, y con el rango un poco más amplio, es la franja de edades que más cae en este terrible mal.
En España, en edades comprendidas entre los 15 y 36 años hay un 41% de personas que se suicidan. Y a nivel mundial cerca de 600.000 personas menores de 28 años de edad se suicidan.
Según las estadísticas, las cifras de las personas que se suicidan en España son mayores a las defunciones en accidentes de tránsito que ya es significativa. Y también al 23,8% que mueren a causa de tumores cancerígenos. Sin importar el género hombres y mujeres son agobiados por los problemas y su mente no es capaz de superarlos.
Así, de cada 10 personas que se suicidan al día 7 son hombres y 3 mujeres. Lo que refleja un promedio de 8,5 muertes/100.000 habitantes. Por lo tanto, es la primera causa de muerte en España en forma no natural.
Los suicidios en 2017 alcanzaron la cifra de 424.523 personas en España, lo que representa un 3,4% más que en 2016. De las cuales un 50,34% eran hombres, lo que equivale a 214.236 personas y un 49,53% mujeres (210.287). Hubo un aumento respecto al 2016 en un 2,5% en hombres y del 4,3% en mujeres.
En 2018, las cifras de suicidios alcanzaron un promedio alrededor de 3.500 y 3.700 personas. Aumentando el número de mujeres hasta un poco más de 900 y de hombres en 2.700 respecto al 2017.
Es un mal sin distingo de ocupación
El suicidio es un mal que se presenta en personas de cualquier profesión u oficio. Se tienen casos de personas de los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado y hasta deportistas. En 2018 se contabilizaron 46 casos de suicidio solo en personas de las Fuerzas Armadas y Cuerpos de Seguridad. Con un promedio de 1 muerte cada 26 días.
El protocolo anti suicidios se entregó en julio de 2018 a la Guardia Civil de España. Y en noviembre se presentó el primer suicidio después de recibir el protocolo. El lamentable suicidio de un sargento de 40 años que se le abrió un expediente por disciplina.
En este sentido el secretario general de la Asociación Unificada de la Guardia Civil de Las Palmas, Juan Couce, informó “en junio de 2018 ya advertimos al General Jefe de la región que se estaba abusando disciplinariamente con los expedientes por faltas graves”. Lo cual incluye suspensión de empleo y paga por varios días. Lo que se considera un castigo grave y excesivo.
Cabe destacar, que la falta de personal especializado es evidente en este cuerpo de seguridad. Se dispone de un psicólogo para una población de 3.000 agentes y oficiales en Canarias. Lo que impide al especialista evaluarlos como es debido y prevenir cualquier intento de suicidio.
En consecuencia, las estadísticas hablan, y los resultados son dramáticos, Se suicidaron 9 efectivos en 2016, en 2017 se suicidaron 17 y en 2018 diez efectivos de la Guardia Civil. Para un total de 500 guardias que se han quitado la vida desde 1982 al 2018.
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Un problema complejo, debido a muchos factores
El suicidio es un problema complejo, que es posible debido a variables causas, que afectan a las personas. Cada día se siguen suicidando más personas en España, en la Unión Europea y el mundo entero. Y las cifras que se manejan no son del todo fiables.
Pues no todos los suicidios se reportan o están “escondidos” tras otro tipo de muertes. Como ahogamientos por ejemplo, o accidentes de tráfico.
En este sentido Javier Jiménez psicólogo clínico, presidente de la “Asociación de Investigación, Prevención e Intervención del Suicidio”, manifiesta que no se conoce la realidad ni la amplitud de este problema en España.
Así expone, entre muchos otros casos, “el de la comunidad de Madrid, que registró un aumento del 250% en el número de suicidios entre 2012 y 2013. Pero este registro, en realidad, solo fue debido a un cambio en la metodología. Probablemente, cogiendo bien los datos de los Institutos de Medicina Legal en toda España… quizá se registrarían 1.000 suicidios más cada año”.
El hecho es que los suicidios aumentan en España. Y el número de hombres que se suicidan es mayor que el de mujeres. Asimismo, las causas que se señalan son innumerables.
Se habla del nivel educativo, donde las personas de menos estudios son las que se suicidan. O la edad, donde las mayores de 70 u 85 son las que tienen mayores síndromes depresivos que los conduce a suicidarse. La situación económica es otra de las causas probables o el estado de ánimo y la depresión.
Lo cierto es que es un problema multifactorial que no se ha logrado solucionar, sea cual sea la causa que lleva a las personas a quitarse la vida.
La psicóloga Antònia Rayó en un estudio sobre el suicidio explica, “Los intentos de suicidio pueden estar motivados por una mezcla de factores genéticos y ambientales…según los expertos, cuando alguien ejecuta la decisión de suicidarse —segundos antes—, en la persona se produce una reacción de “cortocircuito”. Podría decirse que sufre una especie de enajenación mental transitoria, donde fracasa el instinto de supervivencia.”
Por otra parte, el experto en salud mental y profesor de psiquiatría en la Universidad de Arizona, Charles Raison, en su estudio sobre el suicidio, da tres causas específicas. Cuando son víctimas de una enfermedad incurable, cuando la persona está un episodio psicótico o debido a una depresión severa.
Otro estudio publicado en 2017, en “ScienceDirect” indica que el bullying es una de las principales causas de suicidio en niños y adolescentes. La cifra está cerca de 24 millones de niños y jóvenes al año víctimas de este tipo de abusos en la U.E. Según el estudio, “estas formas de maltrato generan una presión, en ocasiones intolerable, viendo los jóvenes en el suicidio la única alternativa de escape posible”.
Otras de las variables que se han estudiado como posibles causas del suicidio es la inteligencia elevada en las personas. Estudios indican las personas más inteligentes tienen una menor insatisfacción en la vida, ya que son muy sensibles a los problemas del mundo.
Muchas personas con buenas posiciones en la sociedad intentaron suicidarse o cayeron en adicciones fuertes como el alcoholismo o las drogas.
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La prevención del suicidio es posible
La realidad es que el suicidio es un grave problema de salud pública en la sociedad española. Y lo más importante es que los especialistas afirman que si es posible prevenirlo.
En este sentido, las instituciones públicas deben trabajar en poner en práctica planes de prevención para lograr disminuir las cifras de defunciones debido a esta causa. Es lamentable destacar, a pesar de las asombrosas cifras de suicidios publicadas, solo 28 países en todo el mundo cuentan con estrategias de prevención del suicidio.
La OMS, en su publicación del 2014, “Prevención del suicidio: un imperativo global”, habla sobre la necesidad de establecer estrategias a nivel nacional para prevenir este mal. Deben contemplen acciones como vigilar, concientizar a la ciudadanía, capacitar personal especializado en salud y educación y bienestar social. Así como dar directrices a través de medio de comunicación sobre cómo tratar a personas vulnerables, entre muchas otras.
Para la OMS, es clave prevenir en los diferentes sectores de la sociedad y hacer un abordaje integral. Elaborar un plan eficaz y asignar recursos especializados para lograr reducir el riesgo y lograr objetivos inmediatos y a largo plazo.
Es necesario que las personas entiendan que sin importar la circunstancia en la que se encuentre, se recuperará y sobrevivirá. Bien sea una enfermedad terminal, ruptura amorosa, muerte de un familiar o desempleo, son circunstancias pasajeras.
Pero debe encontrar el sentido para salir del trauma. Son momentos de gran angustia que solo la familia y los amigos, ayudarán a superar sus deseos de morir. Deben sentirse protegidas y aceptadas por la familia y la sociedad.
También es importante destacar que mientras más sana de mente sea la persona, más recursos tendrá para afrontar la adversidad. Por lo tanto el riesgo de querer morir es menor. Las persona resiliente tienen mayor capacidad de reducir la angustia y de manejar en forma saludable las adversidades.
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Si hay algo después de la muerte espero que sea bueno o, por lo menos, no malo. Porque si lo…